CONVIRTIENDO UN DESPACHO EN HABITACION DE BEBE

Hola familia!!

Como muchos ya sabéis la noticia de nuestro segundo embarazo nos lleno de alegría y con esta noticia surgieron nuevas necesidades.

Aprovechamos el verano para hacer unas chapucillas en casa tales como pintar la casa, lijar y barnizar el parquet, cambio de ventanas y alguna cosa más.

Cuando terminaron todo fue entonces cuando me puse triste al pensar que me tendría que deshacer de los muebles del despacho para poner la habitación de mi bebe.

Tenía especial cariño a los muebles del despacho ya que me los regaló mi abuela cuando se fue a vivir con mis padres y por aquel entonces a ella le supuso mucho esfuerzo comprarlos, solo con  pensar en regalarlos, mal venderlos o llevarlos a un punto limpio me nacía sentir  mal.

Un día se lo comente a mis amigas y ellas me dijeron que se podían reciclar para formar una habitación de bebe.

En ese momento no me imaginaba yo la vitrina del despacho llena de vasos en una nueva pieza para la habitación, la idea del cambio de muebles no  me permitía ver todo lo que estos módulos podrían ofrecerme.

Con el metro en la mano y mi barriguita de cinco meses me puse a medir y a pensar, fue entonces cuando vi la luz y las ideas empezaron a correr por mi cabeza, y de nuevo recuperé la sonrisa, mi bebe tendría una habitación estupenda con los muebles de mi abuela sin necesidad de tener  que desprenderme  de ellos.

Os enseño el despacho.

Estas fotos son de cuando pinte el despacho en color azul, estaba cansada del amarillo.

Pero aquí podéis ver los muebles, son módulos unidos y arriba otro módulo colgande, dos estanterías y la vitrina de la que os hablaba.

Así quedo el despacho cuando terminamos la obra.

 Como veis al no saber si era niño o niña nos decantamos por un verdecito crema, muy suave, y entenderéis que me diera pánico ponerme a ordenar este cuarto!!!

Mis amigas vinieron un sábado a casa a ayudarme a decorar y organizar la habitación. Por aquellas fechas ya sabíamos que lo que vendría seria una niña por lo que el verde quedaría estupendo con los tonos naranjas y rosas con los que quería decorar la habitación, os cuento que fuimos haciendo:

Dos módulos y la vitrina los convertimos en armario, agarrándolos por detrás unos a otros y después anclándolos a la pared para mas seguridad.

Para acabar de dar la forma de armario a la vitrina cosí a mano dos trocitos de tela para que no se viera el interior, era en color crudo con lineas en varios tonos anaranjados haciendo juego con la tapiceria de la silla y las flores de las cortinas, en la ferretería compre todo lo necesario para agarrar estas telas a las puertas de la vitrina y también los materiales para poner una barra y así poder colgar la ropita de la niña.

El módulo y las dos estanterías que en el despacho estaban colgados siguieron ocupando la misma función pero en diferente pared.

Otro módulo igual que el que veis aquí colgante, lo use como mueble auxiliar para los pañales, toallitas, colonias, etc,  usando las puertas del propio mueblecito como baldas

Como veis compre cestillos en rosa y verde para jugar con los tonos de la habitación, al cestillo de mimbre le hice una fundita de tela a rayas rosas y blancas, haciendo juego con el edredón y chichonera que una amiga me dio.

Aquí tenéis el cestillo y un espejo que hice a juego.

Tenia también un mueblecito auxiliar en madera mas oscura, y para que no desentonara le hice a mano las bolsitas de tela en rayas rosas y blancas y compre tres cajitas de tamaños diferentes en los mismos tonos para guardar las gomitas y coleteros de la peque.

Ahora solo faltaba comprar una cunita y un cambiador, ya que mi hijo mayor la cuna la dejo hecha polvo, pero una amiga me dijo que le iba a poner a su peque habitación de mayor y si quería que me lo daba.

Como eran en blanco y los muebles de la habitación eran en color miel me dieron la idea de dar a estos dos muebles toques en color madera.

Al cambiador le puse pomos color madera, y a la cuna le cambie las ruedas por otras que otra amiga me dio en tonos amarillos y marrones y este fue el resultado.

El colchón del cambiador también lo hice yo, con un colchón de viaje que corte a la medida que me gusto y con un trozo de mantel que compre en los chinos .

Y a poquitos le fui haciendo más cositas mientras que esperábamos que llegara el gran día, entre ellas un marco colgante de ranitas verdes y un cuadrito con objetos de bebe en rosa y marcos en verde, la lamina de dentro era un trozo de tela a rayas blancas y rosas

Le hice  a mano dos juegos de sábanas, ya que todas las que tenia eran de niño.

Y por fin conseguí los tiradores que se me antojaron para la habitación, fueron dificiles de conseguir ya que son exclusivos de Disney y en muy pocas ferreterías los venden, al encontrarlos compre de más para curarme en salud.

Buscando un joyerito para mi pequeña que casualidad que encontré uno con los mismos tonos de los colores de la habitación y para rizar el rizo con estos dos personajes de Disney a si es que no me lo pensé y lo compre.

Lo ultimo fueron las cortinas, me las ofreció una amiga que se cambio de casa y no le valían para ningún cuarto

A pocos días de la llegada de la pequeña me acorde de mis muñecas de cuando yo era pequeña, por lo que las lave, las peine y las puse ropita nueva.

Al decir a la familia que el despacho lo había convertido en una habitación para niña imaginaros la cara que ponían, pero cuando la vieron se quedaron gratamente sorprendidos, la primera mi abuela que vio que nuevamente volvía a utilizar los muebles de su salita de estar.

A diario no tengo más remedio que acordarme de mis amigas ya que la cuna y el cambiador me lo regalaron, el edredón y la chichonera con la pañalera haciendo juego y estuvieron montándola conmigo una mañana entera para mi fue un día especial, ellas habían quedado para hacer del despacho recién pintado una habitación bonita y acogedora para mi pequeña!!!